5 de abril de 2015

Muse - Showbiz (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguien me lee, claro). En mi primera entrada voy a hablar sobre el álbum debut de Muse, una banda de rock progresivo que me encanta. El trabajo se titula Showbiz y fue publicado allá por el año 99. Aquí os haré un pequeño análisis sobre cada una de las pistas que componen el disco. Sin embargo, antes de dar comienzo a la crítica, será mejor que nos situemos un poco en el espacio y en el tiempo.

Todo comenzó hará ya unos veinte años en un pueblecito llamado Teignmouth, en el condado de Devon, al suroeste de Inglaterra, donde tres chavales aficionados a la música decidieron formar una banda de rock. Tenemos al guitarrista y pianista Matt Bellamy, al batería Dominic Howard y al bajista Christopher Wolstenholme, que había sido convencido por sus colegas para que dejase la percusión y se hiciese con un bajo en condiciones. El trío dio sus primeros pasos de la mano del productor John Leckie, que había manifestado su interés a raíz de varios conciertos y de algún que otro concurso de instituto. Las primeras grabaciones tuvieron lugar a finales de 1998. Todo esto acabó desembocando en la publicación del debut. Aquel fue el nacimiento de Showbiz.

El principal género que podemos encontrar aquí es el rock progresivo con determinadas influencias clásicas y bluseras. Este disco refleja a unos Muse jóvenes, inexpertos y con bastantes ganas de armar barullo. El sonido es mucho más crudo y ruidoso de lo que estamos acostumbrados a escuchar. Aún así, es un trabajo muy entretenido que se encuentra repleto de buenos momentos. Supongo que Showbiz también tendrá cierto valor sentimental para algunos. 

Bueno, amigos, ha llegado el momento de la crítica. Démosle calor.


Sunburn: El tema que inaugura Showbiz es, sin duda, uno de mis favoritos. La intro de piano que abre la pista nos mantiene en vilo hasta que llegan los primeros versos de Matt, que entonan "Come waste yor millions here / Secretly she sneers / Another corporate show / A guilty conscience grows" con sutileza y sigilo. El dramatismo va creciendo de la mano de una melancólica instrumentación para desembocar en un maravilloso estribillo que reza "She burns like the sun / And I can't look away / And she'll burn our horizons make no mistake" con un estilo casi hasta épico. La verdad es que Sunburn es una canción estupenda. Muy recomendable.

Muscle Museum: La acción prosigue con otra pieza francamente entretenida. Muscle Museum posee un ritmo algo más animado y un sonido bastante más limpio y sencillo. Aún así, continúa con el dramatismo, sobre todo en el estribillo, que recita "Too long trying to resist it / You've just gone and missed it / It's escaped your world" con tono energético y desesperado. El solo de guitarra que cierra el tema es una auténtica delicia. Se trata de una pista muy pero que muy disfrutable.

Fillip: El riff que abre esta canción no está nada pero que nada mal, la verdad, pero creo que el asunto va perdiendo fuelle. La temática de esta pieza es bastante alegre, aunque algo menos original y puede que un poco repetitiva. Aún así, opino que el puente es uno de los mejores momentos de todo el disco, con ese fantástico piano y con ese falsete tan característico de Showbiz.

Falling Down: Esta canción es, en mi opinión, una de las mejores baladas que podemos encontrar en toda la discografía de Muse. Es genial. Falling Down se inaugura con una insuperable intro acústica y con unos maravillosos versos que entonan "I'm falling down / And fifteen thousand people scream / They were all begging for your dream" con tono dulce e intimista. Dominic apoya la melodía desde la distancia con una batería lenta y ligera. El piano y la guitarra van creando una fabulosa armonía que servirá de colchón para Matt, que alcanza unos niveles de motivación y dramatismo que no ha logrado superar hasta la fecha. Espectacular. Una pista encantadora, sencillamente brutal.

Cave: El tema más heavy de todo el disco posee un riff fantástico, muy pero que muy curioso. La estrofa tiene un aire funky, con ese piano tan marcado y con un bajo muy pero que muy juguetón. El dramatismo regresa de la mano del estribillo, que recita "Come in my cave / And I'll burn your heart away" con un tono rabioso y algo épico. Sin embargo, lo que más me gusta de Cave es su puente final, que se desarrolla con un potente piano primero y con un espectacular solo de guitarra después.

Showbiz: Una especie de ritmo primitivo francamente curioso nos deja entrever la faceta más oscura de este disco. Bellamy entra sigilosamente para susurrar "Controlling my feelings for too long" a medida que avanza la acción. La calma se va alterando poco a poco para acabar desembocando en una insuperable estrofa de tono siniestro que dará pie a un dramático estribillo. Showbiz es una pista bastante heavy, con un falsete de aúpa y con un guitarreo sencillamente espectacular. Recomendable hasta la saciedad.

Unintended: El clasicazo del disco es una balada bastante sencillita con unos versos muy dulces y pegadizos a los que no es complicado encariñarse. La guitarra acústica y el piano regresan dispuestos a persuadirnos con una melodía bastante buena que nos mantiene en vilo los cuatro minutos que dura el tema. La verdad es que Matt tiene algunos momentos geniales. Aún así, Unintended no me parece una pieza tan sumamente fantástica como algunos la describen, sino más bien una balada bastante entretenida que se deja escuchar con facilidad.

Uno: Regresa la faceta más cañera de Showbiz con un riff rockero que me parece simplemente espectacular. La estrofa retoma la temática tranquilita y sencilla de las baladas y el estribillo contrasta con un estilo dramático y energético. Una pista sobre la que no hay mucho que decir, la verdad. Entretenida y bastante decente, pero ya.

Sober: Sober es una pieza interesantísima y muy variada, con una estrofa fabulosa y con un par de riffs difíciles de superar. Matt hace gala de un maravilloso falsete durante el estribillo y de un sintetizador genial a lo largo del puente y del solo. La temática es relativamente alegre y bastante cañera. Me encanta.

Escape: El tema se abre con un minuto bastante calmadito y dramático que no tardará en explotar en un estribillo melódico y rockero. Es una pieza muy entretenida, la verdad. Además, cuenta con un par de momentos bastante disfrutables.

Overdue: La canción se inaugura con un riff bastante digno que desembocará en una estrofa calmada que recuerda bastante a algunas pistas anteriores. El estribillo se desarrolla con un tono bastante alegre y distinto al resto del trabajo. Bastante respetable, sí señor.

Hate This And I'll Love You: Muse decide cerrar el disco con una balada relativamente lenta y relajada, repleta de largos y sencillos versos dulzones. La verdad es que Hate This And I'll Love You no aporta demasiado al conjunto de Showbiz, por lo que pasa muy desapercibida. 

Fin de la crítica. Showbiz es un álbum francamente bueno que se encuentra repleto de momentos inolvidables. Además, creo que tiene un valor sentimental bastante importante para algunos fans de Muse (ente los que me incluyo). Sin embargo, opino que es un disco bastante poco variado en cuanto a temáticas e instrumentación y que puede llegar a hacerse algo repetitivo. Aún así, mi enhorabuena al trío británico de hace quince años. En mi opinión, lo más destacable y recomendable es: Sunburn, Muscle Museum, Cave, Showbiz y Sober.

NOTA: 8

Un buen disco para inaugurar la discografía, pero sabed que la cosa mejorará bastante a partir de aquí. Cabe decir que la mayoría de las pistas de Showbiz son piezas bastante sencillas que no alcanzan el nivel medio de complejidad de los próximos trabajos de la banda. Aún así, es un buen álbum que recomiendo escuchar a todo el mundo.

Se acabó, amigos míos. Tengo pensado hablar sobre el resto de la discografía de Muse en futuras entradas, de modo que estad pendientes del blog (¿Hay alguien ahí?). Hasta entonces, pan y agua, queridos. Saludos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario